Es difícil usar todas las hojas frescas antes de que se echen a perder, por lo que es beneficioso aprender todas las formas de conservar la albahaca. La albahaca se seca muy bien, así que deja de comprar albahaca en la tienda y seca todas las hojas que coseches en casa. Convierta la albahaca fresca en pesto para las cenas durante los fríos meses de invierno. La mejor manera de conservar la albahaca es cómo la usarás más. Si a nadie le gusta el pesto, no se moleste en hacer cubos. La forma que elija para conservar la albahaca fresca debería ser la más útil para usted, así que veamos los diferentes métodos y cómo puede guardar rápidamente la albahaca para los meses de invierno.
Maneras fáciles de conservar la albahaca para usar todo el año
Todo jardinero y chef debería aprender a conservar la albahaca. Junto con otras hierbas frescas, como el orégano y el perejil, el sabor de la albahaca funciona en miles de platos de pasta y sopas. No dejes que tu planta de albahaca se desperdicie; conservar la albahaca es más fácil de lo que piensas. Hay muchas formas de almacenar la albahaca y conservar la coliflor sin blanquearla. Tomarse el tiempo para conservar sus alimentos le asegura tener frutas y verduras frescas incluso en el invierno.
Conservar albahaca fresca del jardín
Si decide plantar albahaca a partir de semillas en contenedores o en el área de su jardín, es probable que tenga una cosecha excelente con la que necesite hacer algo para que dure. Aprender a conservar la albahaca es sencillo si decides congelar las hojas frescas. Este método para almacenar albahaca fresca es el más sencillo y versátil. La congelación es una excelente manera de conservar verduras y hierbas frescas. Puede congelar hojas enteras de albahaca o hojas picadas, pero las hojas se encogen a medida que se congelan. Blanquearlo produce los mejores resultados porque mantiene el rico sabor de las hojas de albahaca. Hierva una olla grande de agua y llene un recipiente con agua helada. Una vez que hierva el agua, echa las hojas de albahaca en el agua hirviendo durante cinco a diez segundos. Use una cuchara ranurada o pinzas para quitar las hojas y transferirlas al agua helada. Coloque las hojas sobre una toalla de papel y déjelas secar al aire. Póngalos en una bandeja para hornear en una sola capa y congélelos durante una o dos horas. Después de congelarlos, guárdelos en una bolsa o recipiente para congelador.
Cómo conservar la albahaca después del secado
La albahaca seca tiene miles de usos culinarios, al igual que la conservación de los dientes de ajo de esta manera. Omita la compra de botellas en la tienda y pruebe esta mejor manera de conservar la albahaca. Es incluso más útil que las hojas frescas. Retire los tallos de las hojas y lave, de forma similar al orégano sustituto de albahaca fresca. Use un centrifugador de ensalada para secar las hojas, luego configure su horno a la temperatura más baja. Extienda las hojas en una bandeja para hornear y hornee durante dos a cuatro horas hasta que se desmoronen fácilmente. Guárdelo en un recipiente hermético o en un tarro Mason. La forma antigua de secar la albahaca es juntar las hojas en un manojo y atarlos juntos en un paquete. Cuelgue el paquete boca abajo en un gancho durante dos o tres semanas hasta que la albahaca se desmorone en sus manos.
Formas de conservar la albahaca en cubos
Los cubos de albahaca se encuentran entre las formas más inteligentes de conservar la albahaca; mézclelos en sopas o salsas para darle sabor. Es una excelente manera de conservar la albahaca fresca para futuras cenas. Cuando congele hojas de albahaca, coloque las hojas de albahaca fresca en un procesador de alimentos y agregue suficiente aceite de oliva virgen extra para formar una pasta. Lo mejor es comenzar poco a poco y agregar poco a poco más según sea necesario. Una vez que se forme la pasta, use una cuchara para transferir la mezcla a una bandeja de cubitos de hielo. Congele hasta que esté sólido, luego colóquelo en un recipiente apto para congelador o en una bolsa de plástico. También es posible hacer cubos de albahaca que no sean pasta. Picar las hojas de albahaca fresca con un cuchillo, añadir la cantidad deseada a cada bandeja de cubitos de hielo y rematar con aceite de oliva. Congele hasta que esté sólido y guarde los cubos de albahaca en una bolsa para congelar.
hacer cubos de pesto de albahaca fresca
El pesto fresco grita verano, por lo que es la cena perfecta cuando las temperaturas bajan. Es como un recordatorio del verano y de toda la cosecha del jardín. Hacer pesto de albahaca es el primer paso. Coloque los dientes de ajo y los piñones en un procesador de alimentos y pulse hasta que estén picados en trozos grandes. Agregue el queso y procese durante 20 a 30 segundos. Ponga la albahaca en el procesador y pique en trozos grandes. Vierta el aceite y haga puré hasta que quede suave. Espolvorea un poco de sal y pimienta a tu gusto. Vierta el pesto en bandejas de cubitos de hielo. Congele los cubos de albahaca hasta que estén sólidos y transfiéralos a una bolsa para congelar. Conservar la albahaca es sencillo. No dejes que ninguna de tus hojas frescas de albahaca se desperdicie. Convierta las hojas en cubos de albahaca, pesto u hojas secas de albahaca para platos futuros. Si este artículo sobre cómo conservar la albahaca te ayudó, asegúrate de compartir estos consejos para conservar la albahaca con tus amigos en Facebook o Pinterest.